Actualidad: Cuando tus vecinos son odiosos
Le ha pasado que tiene por vecinos a gente que es muy quisquillosa, que se queja por todo, te reclama por todo, que siempre esta generando un problema, en definitiva son odiosos.
Bueno, eso también nos está pasando a nivel de país. Parece el colmo la medida de Argentina de subir el precio de la bencina en sus zonas fronterizas a vehículos con patente extranjera.
Me parece una medida patética y anti integracionista, cuanto afectará a la economía de su país que localidades fronterizas como Puerto Natales vallas a cargar combustible a la localidad argentina de Rio Turbio, y así en otras pequeñas localidades, se producirá un descalabro económico. Si la medida es para controlar el contrabando hormiga, existen entidades como Aduana o la Policía Internacional para fiscalizar esta situación.
Esto es simplemente otra medida desmedida y discriminatoria en el campo energético, que desde hace tiempo el gobierno argentino esta jugando chueco.
Además, me parece que las autoridades argentinas son por decirlo menos muy sinvergüenzas, ya que a tres día de su visita a Buenos Aires, la ministra de Energía y Minería, Karen Poniachik, volvió a comunicarse la tarde de ayer con las autoridades argentinas para informarse de la nuevas medidas restrictivas, como tan cara de raja, no pudieron comunicar la medida en la misma reunión de la semana pasada.
Así se habla de integración, hermandad, unificación de los pueblos, puro verso y labia de los argentinos, en la practica nada y siempre están colocando trabas que afectan la deslavada integración, pero también no faltan los giles chilenos, mamones que dale con encuentros culturales, folklore, encuentros deportivos, y que esta es la verdadera integración de los pueblos, chao no seamos ciegos, la verdadera integración esta en hechos concretos reales, no en banalidades faranduleras, la economía abierta entre países fronterizos, la libre circulación de gente, el transporte de pasajeros, el turismo, facilitar el transporte de carga pesada para abastecernos de productos de otras localidades de nuestros países, en la práctica todas la facilidades para los argentinos y para nosotros puras trabas de parte de ellos.
Luego los países limítrofes, nuestros hermanos se quejan que nosotros negociamos o hacemos tratados de libre comercio con otros países en desmedro económico de la región, por supuesto primero maduremos, seamos países responsables, serios, estables, leales y no chabacanos, como se va a negociar con supuestos vecinos hermanos, si son poco serios, irresponsables, no respetan los acuerdos, los tratados comerciales, siempre están cambiando las reglas de juego, existe un tremenda deslealtad en definitiva son muy mala leche.
Olvidémonos de estos tipos y hagamos verdadera integración con gente que no sea mala clase, que tengan reales intereses integracionistas y que de verdad no sean venenosos ni doble estándar, que en lo público tienen un discurso y en la práctica hacen otra.
Con estos vecinos odiosos, uno no tiene ganas ni de darle los buenos días, la integración con los argentinos vale hongo.
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