Deportes: La marea roja Bipolar


Es increíble como la falta de cultura e idiosincrasia deportiva quedó de manifiesto en el partido de Chile con Brasil. Yo no se de donde salió ese optimismo exacerbado, esas ansia de triunfalismo desmesurado, poco objetivo, chovinista y sensacionalista, de que éramos favoritos ante Brasil, que era llegar, salir a la cancha ganar a Brasil y hasta golearlos, algo irrisorio si pensamos que estamos jugando ante los penta campeones del mundo, aunque el equipo de Dunga ande muy mal y sobre todo si en lo últimos partidos enfrentando al scrach no hemos ido de goleadas.


Esa falta de idiosincrasia también quedó reflejada en el público que asistió al estadio, un hincha poco futbolizado, apagado, casi silente siguiendo el partido.

Por otro lado, una tremenda falta de respeto por parte de la hincha a los jugadores brasileños, con razón Robinho dejó estampado su malestar en la pizarra del camarín carioca.

Así, el partido que no se puede perder es el de Colombia, un rival directo, un equipo que está a la atura de la Roja. Un rival abordable, que no va a ser protagonista del juego, que lo más probable es que venga a hacer su negocio, tratar de llevarse un punto, por lo tanto, jugará muy defensivamente con línea de cuatro apostando el contragolpe. Es aquí en este partido donde Chile debe demostrar superioridad, va a tener que bregar mucho para romper la última línea Colombiana, pero sobre todo, va a tener que lidiar con sus propios fantasmas, que en este caso es la falta de finiquito y plasmar el dominio del juego en el arco rival y sus errores defensivos, a Bielsa le quedan dos días para tratar de compensar su juego ofensivo con mayor solvencia defensiva, aquí va a estar la clave, lograra equilibrar las líneas y concretar las ocasiones.

Este partido se debe ganar, y no por ello vamos a ser los mejores de America, pero igual, les apuesto que nuestra hinchada trasformara la victoria en un alegría desbordante, como si hubiéramos conseguido ya la clasificación al mundial, es nuestra falta de idiosincrasia futbolera que nos hacer pasar rápidamente desde la tristeza mas profunda a la alegría más desbordante, demostrando el síndrome bipolar del hincha nacional.

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