Cultura: ¿El Festival Folklórico de la Patagonia nuestro de cada año?

Se nos viene este fin de semana una nueva versión del festival Folklórico en la Patagonia. Cambiando por primera vez en su historia las frías noches de invierno por el primaveral viento de octubre tan característico de Magallanes, tres días de manifestación folklórica latinoamericana, dicen ,de integración chileno argentino, en la cual toda una ciudad debería girar en torno a esta manifestación cultural.

Lamentablemente no es así, en una ciudad de 140.000 habitantes, no es posible que un reducto como el Gimnasio de la Confederación o el Fiscal que albergan a unas 4.000 personas, todos los años cueste una enormidad que se produzca un lleno en cada una de las tres noches, lo que demuestra, al contrario de lo que cree el circulo íntimo del festival, que éste no llega en un gran sector de la comunidad, es decir, no es un evento masivo, ni popular, como debiera serlo.

Desgraciadamente creo que el festival sufre de un desgaste, o peor aún gran parte de los magallánicos no se sientes identificados que esta identidad cultural de folklore patagónico, pero la verdad es que a mucha gente simplemente no le interesa el festival, no se siente identificado con este evento, lo que considero lamentable, pero es una realidad que debieran tener en cuenta aquellos que cultivan, promueven, difunden, enseñan nuestras raíces folklóricas.

Es raro este fenómeno, si bien el festival se ha mantenido en el tiempo, no es menos cierto que ha sido a puro ñeque y entusiasmo de un grupo que no me cabe deuda quiere este festival, pero también ha traído un enorme dolor de cabeza a muchos. Quizás en antaño, en un mundo menos globalizado, menos comunicacional, sin cable, ni Internet en una ciudad aún mas aislada, el festival era una muestra clara de entretención que unía a una gran parte de la comunidad y se transformaba en una fiesta en torno a este evento acortando las largas noches de invierno y cumplía su rol de expresión, creatividad, entretención, de identidad regional. Pero los tiempos cambian y lamentablemente esa imagen romántica del festival que se ha mantenido en el tiempo ya no pega en las nuevas generaciones en esta ciudad cosmopolita, de bastante diversidad de colonias, costumbre y de mucha gente foránea, sólo para dar un ejemplo, cuantas “familias de las fuerzas armadas” rotan en unos cuanto años y cuantos extranjeros o gente del norte se ha establecido por motivos laborales en nuestra ciudad en los últimos años, por otro lado son muchos los magallánicos, hijos de esta tierra que después de dedicar su vida al trabajo al momento de jubilar se radican en el norte del país, es decir vamos quedando menos magallánicos nacidos y criados.

El tema pasa igual por que se ve una mezquindad en cuanto a la organización del evento, ya que éste lo realiza un grupo muy reducido de personas y que en definitiva son los que contratan y realizan la programación con criterios bastante personales.

En cuanto a la parrilla programática lo más destacable es la inclusión de varios grupos de jóvenes folkloristas regionales, en el show internacional, podemos mencionar el reestreno de Los Tres (a quienes iré a ver), Luciano Pereira y Roberto Terán, lo demás es bastante repetitivo, considerando que he asistido en forma consecutiva los últimos 7 años.

La invitación está extendida para todos aquellos que no conocen el festival a que asistan a presenciar el folklore patagónico con identidad regional, los días 26, 27 y 28 de octubre, es decir este fin de semana en el Complejo Deportivo de Chiledeportes, Gimnasio Fiscal.

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